He de buscarme en el silencio
cuando todos los que me ven se hallan marchado
los que ahora me dicen que mi risa a sus dolores
quita fuerza y que no en vano
soy una golondrina que en su trino lleva
un canto de armonía y un poco de nobleza
Pero es que ellos aún no me conocen, ellos no saben
de mis amaneceres en que la vigilia y el llanto
me rinden al dolor del vacío de existencia
La que se arrodilla en la oscuridad para que no la noten
para clamarle al Señor por esa soledad que la enajena
la que ruega por un día mejor sin que la pena
dirija su brújula en contra de los vientos
para que vuelva a reir de igual manera
y que no convierta su vida en un lamento
así quiero seguir...con la lágrima escondida
y con un canto anticipado de mi encuentro