Ella intentaba siempre despertarme,
inundando mi ojos con rayos de sol.
Yo siempre le decía,
Dame cinco minutos mas para ponerme de pie,
Ella decía solo inténtalo una vez mas,
aun tienes tiempo.
Ella trato de levantarme de la cama,
pesaba tanto mi miseria que no pudo conseguirlo.
Las gitanas alguna vez decretaron,
Este tipo no tiene remedio,
Ella siempre intento levantarme,
yo había olvidado como hacerlo.
Ella trataba de inspirarme con viejos triunfos,
recordándome los viejos días de gloria.
Yo contestaba proyectando mis fracasos.
Ella comenzó a pensar tienen razón,
los castillos de naipes decía,
siempre terminan derrumbándose.
Ella decidió abandonarme,
encontró un tipo mejor que yo esa tarde.
Sabia que tarde o temprano sucedería,
nadie espera por siempre un cobarde.
Ella es un recuerdo olvidado de mi memoria,
no se si ella podrá recordarme.