Este amor es un destello en la noche,
Un irresistible placer
Que al levantar las sábanas,
Serán nuestros cuerpos, por la mañana,
Tu boca crece como un gigante hambriento,
Como este desmedido amor en el verano,
Toda la vida se escribe en tu piel,
Y en el fresco murmullo de tus labios.
Padecemos de un agudo arrebato frutal,
Aromas que van saliendo sin evitarlo,
Llegan a mí como perfumes
Los recuerdos de las noches en que no dormíamos,
Y se pueblan de extraños sueños,
Como la larga letanía venida del mar.
Julio Casati