Dos duendes me habitan,
Dudas y Celos son.
Uno es gris y misterioso,
el otro negro y sin control.
Transitan mis pensamientos,
azuzando mi razón,
susurrándole patrañas,
llenas de mala intención,
“hoy fue un solo mensaje,
ayer escasamente dos
y antier cuando conversaban,
había tedio en su voz”
Ahora mismo juegan futbol
¿de balón?, mi corazón,
lo vapulean sin clemencia,
hasta causarme dolor.
Por suerte cobijo otros duendes,
Confianza, Cordura y Amor.
Incombustibles aliados,
en mi batalla interior,
o ese dúo desalmado,
aniquilaría nuestro amor,
aprovechando tu ausencia,
nuestra cruel separación.