Dedos que se embriaguen de prisa,
y dibujen en tu espalda el espiral de mi estigma.
Dedos que presuman sus desmanes y atraviesen
todo el tiempo el vaiven de mis alardes.
. Dedos explorando tus impulsos para darle forma
al aire que recoge tu murmullo, dedos, acordes
musicales que imprimen en la noche de suspiros
una calle, por tu espalda misteriosa y sus muslos
a pleno auge, dedos mios! No se escapen!