Junto a este esplendor
sereno del tiempo te
pienso, aquí, cuando el
soñar despacio es un
beso que arrojado al
viento conmueve,
aquí, esperando sin prisa
a que despiertes,
con mi alma corporal en ti.
Te miro,
¡qué hermosa TÚ, libre!,
¡al abrigo de tus párpados
mi silencio es tan claro!,
te contemplo, en los extremos estás,
apenas el aire y te pregunto sin palabras,
esa forma de tus labios,
aquel color,
toda TÚ escapa de ti cuando te miro.
No es la luna,
no el amor, ni siquiera la nostalgia
de sentirte cerca,
te presiento, de mis brazos la
confianza de un secreto que es afán,
si seguir más hacia ti,
si abierta donde estás junto a mí,
si hallarte gozosa de los dos,
con tu alma en mi alma, y para siempre.
Te quiero,
rendido a ti para ser contigo, tendido,
a tu costado vencido por la noche
de tus deseos, ingrávido, donde
sólo nuestras manos tienen memoria,
y acariciarte sin buscarte,
y esperarte sin nada pedir,
y soltar la falsa prisa para caer lentamente en ti,
hoja por hoja.
Los cielos se repiten,
si lluvia, si viento, si calma,
si mirarte mientras las estrellas distantes,
¡si quererte tan llena de abismos como yo en ti!
Mañana ya no estaré desnudo,
tal vez estés, tal vez no,
no me fío de la razón y sus promesas,
no me basta con que sepas que TE AMO, ya no más,
quiero una tarde y noche y alba y tarde y
sin límites, quiero agotar mis palabras,
y mis gozos y mis colores,
quiero descubrirte y que me escuches decirte,
¡no quiero que te vayas!,
aquí, esperando sin prisa
a que despiertes,
con mi alma corporal en ti,
para ser mío en tu vivir,
para tuyo, donde me creas.
T de S
MRGC
Namaste