A tu arribo…, nació mi perenne sonrisa,
Me crecieron alas,
Y pude volar libre, entre tu amor y la brisa.
Por tu amor…, tengo el alma enamorada,
Una vida renovada,
Y un brillo inmenso en la mirada.
Te creí lejano, imposible,
Ajeno a mis sueños…,
Pero eres ahora realidad tangible.
A tu arribo…, trajiste mi felicidad,
La pasión, el deseo... y la paz,
Y negaste a este amor..., la caducidad!.
Claudia Alhelí Castillo
20-09-13