Puedes venir desnuda a mi encuentro
te esperare a brazos abiertos
caminaré los volcanes de tu cintura
el ancho valle de tus caderas
retumbando el horizonte de tu boca
haré espuma de tu mejilla,
que mis manos posen
a la horilla de tus piernas coralinas
haré que se queden para siempre
mis caricias en tu cuerpo.