Me quedé
con esos momentos tan sublimes,
en mis recuerdos.
Me quedé
con los besos tan sabrosos que me diste,
en mis labios.
Me quedé
con la ternura de tu mirada,
en mi alma.
Me quedé
con la alegría de tu sonrisa,
en mi corazón.
Me quedé
con tus lágrimas derramadas,
entre mis dedos.
Me quedé
con el calor de tu cuerpo,
en mi piel.
Y me quedé
con tu amor aunque ellos lo negaran,
en todo mi ser.