Jorge Gambetta (jorgam)
He andado ya la mitad de mi viaje,
y dejado en el camino,
algunas cosas.
Como todo peregrino he aprendido
entre lágrimas y risas
que llegaré a mi destino
con el peso necesario.
La mochila de mi vida
se ha venido alivianando
con las cosas que he perdido
y otras que fui descartando.
Las ausencias ya no pesan
aunque a veces me han anclado,
lo esencial lo he guardado
como intangibles tesoros.
Esa fortuna infinita,
tan liviana e invisible
es lo único exigible
en la última parada.
Y como doy por seguro
que he de cruzar la llegada,
voy gozando sin apuros
mis riquezas más preciadas.
Ya no tengo tanta prisa
voy sorbiendo los momentos,
quiero morirme de risa
cuando se acabe mi tiempo.
Y si me lloran lo siento,
es que no me han comprendido
se irá mi último aliento
sin que yo me haya rendido.