Las sabanas anochecidas albergan calor
han abierto en su lecho amaneceres de temor,
las madrugadas de lamento obligan a laborar,
sigiloso levantarse aunque quiera descansar,
los caminos estan llenos de acertijos
al sufrimiento y la tristeza seremos sus hijos,
los pasos dificilmente deducen las sorpresas de la vida
llevaron a las huellas a emprender la huída.
Cada día es una leyenda
llena de páginas sueltas en ocupada agenda,
despiertos los sentidos, envueltos en el realismo,
muchos sueños deseados, son solo un espejismo
de aquel despertar incierto alejando al romanticismo.
Fantasías anheladas, frustraciones encontradas;
así es la vida complicada y delicada,
las horas ansiadas por momentos esperados,
se han comprimido por segundos,
meciendo al tiempo en distintos mundos.
Los placeres son tan solo deseos
momentáneos y esporádicos, no son eternos;
son solo instantes a una alegría fingída
opacada al regresar a la realidad de la vida.
Una juventud que va envejeciendo,
van contando los recuerdos que fueron corriendo,
pocos momentos de alegría
como un año biciesto demoraría
son mas batallas tragicas contadas
como la arena de las playas.
¿Seremos turistas extrañados
recorriendo asfaltos y paisajes admirados?
¿Donde se ha grabado el sonido acustico de la risa?
¿He de parar el tiempo aun cuando marcha deprisa?
no hay destino escrito en los días,
somos libres manejando el timon día tras día,
la rutina descrita por versos en distintas vías,
es tan solo la realidad de los días.