En la cueva de Simón
hay cartel de invitación
porque le regalaron
un queso estacionado.
Entonces. . .Hay banquete
lejos de zoquete, el
gato de la vecina
que invade la cocina.
Carmín bella ratona
es muy buena anfitriona
que tiene preparado
a cada uno un bocado.
Detrás de la heladera
está la ratonera.
Unos salen despacio
como bailando adagio.
Los que llevan el queso
se apresuran por eso.
Sin ninguna pereza
la comida ya empieza. . .
Cerca de la mesada
no visualizan nada
pero allí se había caído
detergente diluído.
Avatares del tiempo
la ventana abre el viento
y zoquete atrevido
Ingresa haciendo ruido.
Avanza como tropel
porque un festín ve para él,
no ve la jabonada
y resbala de entrada.
¡Por no tener cuidado
se cae desparramado!
Ratones asustados
escapan por los lados
y emiten chirridos
al huir despavoridos.
Viene el ama de casa
con camisón de gasa,
en su mano una escoba
parece voladora.
¡Llegan los escobazos!
El gato da zarpasos
y ratones en huída
llegan a su guarida.
Colorín amarillo. . .
¡Se terminó el ovillo!
Colorín naranjado. . .
¡A su fin ha llegado
el cuento ratonado!
Autora: Graciela Beatriz Traverso.