Alegóricamente el amor puede ser una llama
Porque quema el vientre y todas las entrañas
Mas es un fuego cálido que no produce dolor
Y a pronóstico contrario trae consigo excitación
Alegóricamente la ira puede ser una llama
Porque quema el vientre y todas las entrañas
Mas es un fuego pérfido malsano al alma
Doloroso y profano; melancolía encarnada
Alegóricamente la confusión puede ser una llama
Porque quema el vientre y todas las entrañas
Mas es un fuego quieto tácito desolado
Aturdido y apresado: reo de la desesperación
Y pensar que esas llamas no se forman
Como suelen formarse comúnmente las llamas
Si no pues
Surgen de pálpito en razón de las desgracias
Que produce uno que otro fulano
Que sin permiso alguno y de buenas a primeras
Se van instalando irremediablemente en el alma