Porque sin buscarte,
Ando encontrándote,
Todavía hay tiempo para imaginarte,
Para creer que aparecerás en cualquier instante.
Yo esperando lo divino de tus labios,
Quería desgarrar nubes con mi boca,
Y me encontré con lo hermoso de una tormenta dentro,
Comprendí lo que esas lunas me hicieron deslumbrar,
Y entendí, mis miedos de ser una mas.
Y estaba ella, con sus inseguridades y defectos,
Con la imperfección plasmada en cada poro de su piel,
Ahí estaba ella, consumiéndose poco a poco,
Sin saber que para él, ya era perfecta.