Anoche estuve contigo
bajo la sombra de un olmo
tu amor seguía siendo mío
y el mío tuyo…
Tus besos eran dulces en mis labios
tus brazos me envolvieron en tu pecho
tus ojos me miraron,
como nunca antes me vieron.
mis piernas se enrollaron en las tuyas
y mi cuerpo temblaba en tu mirada
mis labios caminaron por tu cuerpo
y fuiste mío como tatas veces,
mis gacelas gozaron en tus labios
y tu cuerpo se unió al mío.
-Y en mi sueño fuiste mío, igual que otras veces-
sigo con el sabor de tu boca en mis labios
y el amor que encima nos dimos.
bajo la sombra del olmo que celoso se puso
al ver mi cuerpo desnudo…
Nos abrigo la noche con sus alas
Y nos besó la luna la piel…
y de mi vientre volaron gaviotas a su nido
y me encontré volando en el espacio
que sepultó tu cuerpo y el mío.
Y en aquella noche se escuchó un lamento
¿Dónde están los amores que fueron míos?
-fuiste la noche de mi deseo-
Tejí estrellas para ti, a tu viaje celestial
Y en cada una dejé mis besos.
Y en tus brazos desperté, pero no estabas allí.
Y nunca estarás… tú eras la sombra del olmo
y en tus brazos me soñé.
En noche de luna llena.
Alicia Pérez Hernández
-No es la pluma la que escribe es el alma-
A la sombra de un olmo…para ali
A la sombra de un olmo se iba el día...
Bajo la enramada soy descansado:
tan profundo era el dormir solazado,
que un soñar delicioso me venía.
En sueños soñándote te veía,
y teniendo en mi pecho tu cuidado,
era de ti ya tan enamorado, dulce ali
que el labio fervoroso te ofrecía.
Placeres que mi anhelo deseaba,
que tu boca placeres me pedía
de olorosa flor que el huerto exhalaba,
viniéndome de ti, que a mí tenía,
yendo a ti mi vida, que me excitaba
el erguido clavel que florecía.
- Vida me dabas bajo la sombra del olmo
amandonos tu, y yo, Alicia mía.-
(Salvador -20- 2- 10- GRANADA)