Murialdo Chicaiza

Para ella

 

Tú eres el bálsamo divino

formado por manos supremas

que en un sueño

me despojó quedito el alma.

 

Con tu sola voz

anuncias la llegada del alba

y el sonido anticipado

del viento te canta.

 

Quisiera ser tu pensamiento

perpetuo y rutinario

ser de tu jardín alguna rosa

o el rubor de tus mejillas serenas.