Yo no te deseo la muerte, no.
Al nacer supe ya que morirías...
Más sin embargo, te deceo vida,
Mucha vida, ó larga vida
Vida suficiente,
Para que me sepas existente,
Y cuando mires tus manos extrañes las mías,
Para que cuando tus ojos miren,
Me busques en la multitud,
Y mientras Eros se apodere tu sexo,...
Desees irasciblemente mi carne.
Y por la calle, cuando sólo veas tu sombra
Sientas la ausencia flagelante de la mía.
He pues, que sé, que llegará el día
En que cara a cara estaremos,...
Y sabré que tu vida ha sido una agonía.
Te deseo vida, mucha vida!