En cada esquina de mi vida yo encuentro
Tu mirada de alegría en las mañanas
al caer el sol, bajo el manto de la noche
imagino, te recuerdo y te sueño
en estos te veo como ave pasajera
un ave sin cadenas, sin jaula, sin dueño
No siendo esto un cantar, un reproche
es un grito de silencio ¡No te tengo!
Miro de cerca en mi mesa tu retrato
aquel que robe en tu presencia
curo mis penas, el mal rato
y me acojo al regazo de tu escencia
la que de humo matizo este, mi cuarto.
Me acuno sigiloso en un abrazo
aquel que tome por vez primera
cuando por fin conocí la paciencia
de quererte y de amarte sin recato
Mil besos forman la historia
besos de amor, besos de gloria
besos que deposite en tu sombra
besos que dejaste tu,
en mi vida, mi cuerpo y mi soga