Lo ajeno***
Cristóbal Rozzo
Astro de luz ambidiestra,
Despampanante y bella.
Con un toque de siniestra,
¡Cuán solitaria estrella!
Sol de amores deshechos;
Son amores olvidados,
Que las penas y despechos
Quisieron ver maltratados.
Que una nube de seda
Entre sus brazos esconde;
Con la luz del sol se queda,
Pero nadie sabe dónde.
Astro de todo; de nada,
¡Brille en mí tu luz grandiosa!
Mas quedas enajenada,
Aunque sigues siendo hermosa.
Luz ajena, penetrante,
Que ya no tiene cordura.
Vacilante, parpadeante.
Ya es poco lo que dura.
Mil rostros de caras; una,
En la cual no brilla el sol.
Tampoco cumplen la luna
Ni las estrellas con su rol.
¿Cuesta tu calor sereno?
Paz a tu alma sagrada…
A tu luz estoy ajeno
Y muere tu llamarada.
Eco del viento solar
Que una vez fuera vida.
Sabe que no puede volar,
Pues su luz está cautiva.
Lumbre pura y divina
Entre tinieblas malvadas.
Envidia clandestina
De aquellas las nubladas.
¡Brilla estrella del cielo
Como nunca lo has hecho!
Que esas hijas del celo
Por ti andan al asecho.
Mas fue, pues, inevitable
Y pudieron más los celos
Que la estrella formidable;
El príncipe de los cielos.
…Tiempos oscuros pasaron
Sin que nada ocurriera
Y las estrellas lloraron
Por quien alguna vez fuera.