MINUÉ.
Como un minué.
Que acerca suave y lento la música a los cuerpos.
Como un minué.
De fragancias que asoman a ras de las ventanas,
en las hondas distancias que acerca algún quinqué.
Del balcón perfumado que a la noche entregara
la invisible vertiente de un agua de jazmín.
Como un minué.
De delicadas notas desgarrandos silencios
con la serenidad apacible de un lago
y los suaves aromas que incorpora el jardín.
Con hondas precauciones los dedos se entrelazan
contando breves pasos que los brazos acercan
bajo la blanca luna que refleja en la frente
su pálido dibujo de luz sobre la tez.
Como un minué.
Reclinada en balcones la rosa se estremece
con su misterio antiguo de abanico y encaje
que no alcanza a esconder los preciosos detalles
que velan las pupilas al danzar el minué.
¡Ay!, Qué amable la brisa, qué dulce que embalsama
El paisaje de nácar que ocupan nuestros pies.
Cristina Cammarano.