Tú imagen enciende llamas incandescentes
para dar el proceso de aleación de este metal,
que se complementa con todo tu ser.
Siento el fuego que me quema
al tocarte suave muy lentamente
elevas el éxtasis de mis emociones.
El calor que provocas a esas altas temperaturas,
mantienes de día y de noche la calefacción
del palacio real e iluminas la oscuridad de esta soledad.
Muy intensa excepcional son tus expresiones,
Tú aroma más encantador que los sabores del vino,
El agua que brota de ti clama la tierra donde vivo.
por: Kenthon Adam Medina Lara
4 de octubre de 2013.