Corazón marchito
Soy el Corazón marchito
En la soledad infinita de la adversidad,
El arbolito compuesto
En la noche de "Navidad".
Las figuritas, colgantes y sufrientes
En medio de luces solitarias
Que apagan y prenden
Sin un niño que grite o cante
Soy el barco abandonado
En el océano de las pasiones.
Soy como el Cóndor herido que baja, los altos de la cordillera extenuado,
En busca de un nuevo refugio
Para Anidar y cuidar sus heridas.
Ojalas Pueda levantar y sanar sus alas
De sus tristes heridas
Y nuevamente Encontrar Los Picos montañosos para volver a volar,
Surcar los cielos, olvidando sus penas que los Hicieron bajar.
Yo no escribo porque sí,
O atención que no merezco,
Sólo escribo Porque mi alma está en pena, las Cuales quiero olvidar
¡Adiós ilusión en flor!
Estrella luminosa Adiós
Solamente comparable
Con la luna de mi amor.
Cuando alguien sienta un dolor
Como el que yo siento
El Creador quiera que su lamento
No hay mal de tal crueldad que atraviese sus sentimientos como las olas y el viento.
Autor: Hernán R. Cornejo Véliz