tony soto flores

Tú mi poesia

 

Eres la compañera coqueta  caprichosa que me incita a buscar en mí diversas formas de hablar  en letras con el corazón al desnudo, haciendo a un lado todo aquello que encarcela mi  ser con prejuicios, negándome ser yo mismo, cuando me acompañas aumentas mi confianza, si te alejas el alma se inunda de una sensación especial que la reconforta y al mismo tiempo, me veo como un tonto de ver que te necesito cerca para seguir haciendo aflorar todo lo bello que conservo en mí y puedo expresar.

Eres aquel viento frio y sutil que en algunos momentos de vacío y rutina con inspiración única cubres mi mente de bellos pensamientos que al ser enarbolados en un papel hacen ver mi realidad con diferentes matices, llenando mi ser de emociones tan mías, que me invitan seguir adelante en el sendero que la vida me guie.

Eres la fuerza espiritual que inunda mi corazón de emociones puras y sublimes, que las hago brotar en letras como flores de bellos colores, impregnadas de sentimientos perennes que al ser reconocidos con la mirada iluminan todo el ser de aquel que comulga en tu esencia misma.

Eres como el licor que en noches bohemias me embriaga, volviéndote fuente inagotable de recuerdos y momentos que aturden mi memoria con su golpeteo,  tú poco a poco gobiernas mis sentidos, brotando en mi pensamiento letras escritas con el autentico idioma del corazón, plasmándose  como una creación e inolvidable, dejando una huella imborrable.

Eres mi cómplice que con el manto sutil de la inspiración me cobija en los momentos de pasión arrebatada, quizás prohibida que al emanar de mi, solo son versos que con su brillo muestran el sentimiento tan puro que expresan y tal vez sean incomprendidos.

Eres aquel refugio que me acoge en aquellos momentos de incertidumbre, impotencia y oscuridad envolviendo mi existencia en un laberinto sin salida, y tú me confortas llenando mi mente con ideas y palabras que al fluir muestran la crudeza de mis sentimientos, y con el paso del tiempo solo sean recuerdos que no me afectaron.

Eres como la confianza que envuelve al payaso callejero quien a pesar de las adversidades se siente el dueño de la situación cada vez que presenta con monólogos y malabares a la gente que transita por el viejo parque, conformándose con unas cuantas monedas, así infundes a mi alma la fortaleza para vivir la sensación sublime de hacer emanar sentimientos en forma muy mía, aunque algunas veces no sean comprendidas, sintiendo la satisfacción de que son algo muy mío.