Creo existe un deseo en tu piel.
Existe una cálida margarita tocar
tus mejillas rojas al revelar la
majestuosa sonrisa que
adorna tu rostro.
Creo ver en tus ojos la luz.
Creo verte caminar desde
donde mis palabras no se
oyen y creo que saber que
existes y sabes que existo.
Creo pensar que algún día
que me querrás y ese día
te abrazaré hasta tocar tu
corazón e impregnar mi
perfume en tu alma.
En mi sueño te tendré,
imaginare tus beso en
mi piel y me dejare llevar
por tu recuerdo, por ese
glorioso recuerdo. Si te
alejas y no me distingues,
y si algún día me permitieras
rozar tu labios con los míos.
Creo escucharte tu risa,
creo ver que escuchas
mis letras y canciones que
me mencionan tu hermoso
nombre. Mi corazón será
mi armadura para ti y te
acercaras a tocar mis
manos y acariciar tus
dulce mejilla de miel.