Estoy preñada de palabras, siento cómo se agitan en mí...
Palabras de aire, aire que palpita en soplo de inspiración. Son las hijas del idioma.
Palabras que se tornan de colores, que quieren extenderse como fina gasa de nubes, como manto de estrellas en la noche silenciosa.
Brota en mí la vida plena, mi voz alzada en el canto vibra en tonalidades, en vocablo claro.
Hablo de palabras en el vacío que me lleva, en el vacío que suena, resuena como eco de las cosas perdidas y llegan al mundo con asombro.