Ahora observo el cielo cada noche,
para encontrar en él tú corazón,
y en medio de las sombras infinitas,
lo muestren las estrellas con su luz.
En él un gran amor de abril descansa,
aun en la distancia, siento que logra
despertar un rayo de esperanza
e ilusión en las huellas de los sueños.
Inevitablemente al descubierto
han dejado mis ojos el sentir,
haciéndome admitir cuánto disfruto,
de estas noches que son interminables,
mirando un corazón brillar de amor,
en la vasta expansión de un universo.