Oh, nena cómo me gusta lo que eres; la forma en que miras al universo tan fijo y yo poder darte cada una de las estrellas.
Oh, nena; déjame recorrer tu firmamento en este cielo oscuro iluminado por tu ser.
Oh, nena; nada se compara a ti, cuando venus cae a tus pies y te abrazo en este cuento real.
Escucharte es el placer de los ángeles y verte es el sueño que se convierte en realidad…
Vienes a mí, vienes buscando un amor que nunca renunció.
Si te quedas hoy el futuro descansará en lo que seremos; y en la mañana sólo habrá un sol que nos ame.
Recuérdame cuando el otoño no desee morir en tus lágrimas…
Recuérdame cuando el viento no quiera dejar de soplar…
Recuérdame cuando el amor sea tu hogar…
Vienes buscando un sentimiento que nunca se desvaneció y si solamente te quedas a mi lado el mañana despertará con un sol que nos ame…
Un sol que no tema de la noche, oh, nena; será un sol que nos ame…