Siempre quería verla, junto con ella estar,
Tenerla entre mis brazos y sus labios besar;
Pero eso era imposible, una dulce ilusión,
Un anhelo frustrado, un sueño y nada más;
Yo bien lo sabía que ella a mi lado jamás
Iba a estar, imposible, dar vida a mi obsesión;
Siempre yo la esperaba, el poderla mirar
A su puerta, fugaz, su belleza mostrar;
Pero siempre esperaba, qué desilusión,
Ella no aparecía: -jamás ya la verás,
Ella te desprecia, que nunca entenderás
Que ella es como diosa ¡pero sin corazón!;
Ella sólo valora cuánto le puedes dar,
A ella jamás le importa cuán la puedes amar
Y sólo le interesa, cuán grande decepción,
El valor del dinero que tú le pagarás;
Eres inversión, juego, tal vez comprenderás
Que si tanto la quieres: cartera y no pasión…