nelida anderson parini

A PECHO ABIERTO IMPLORO TU REGRESO.

Semejante a una voz sollozante al oído

el dolor de tú ausencia me destroza las ganas;

tú fingiendo ignorarlo en agravarlo te afanas

al menguar brío a un cauce de cinismo obstruido.

 

Sufrimiento trae al mundo evidente descuido

que rubrican demoras al doblar las campanas,

sollozantes de angustias plañen voces lejanas

repitiendo razones de ignominia y olvido.

 

Pavonearte has sabido en tu propia injusticia

al hacer aspaviento de moral y prudencia,

disfrazando la mueca de evidente codicia

 

disimulas las huellas de tu ingrata renuencia.

Hoy mi pecho te exige que regreses: ¡Justicia!

Tengo abiertas las puertas, no hay en mí reticencia.