Si quisiera hablar de amor, hablaría de las flores deshojadas de respuestas,
De los cinceles que a manos tiendas, quiebran corazones,
Si quisiera hablar la palabra amor, hablaría de tristeza,
No pediría una luna, ni la buscaría, surcaría los caminos,
Para yo mismo de mi miseria hacerte una estrella.
Si quisiera embestir uno tras uno los corazones,
No lamentaría el amor, y no daría orgullo a mi nada, pues mi nada me completa,
Si quisiera hablar de amor, revestiría mi esencia,
Te daría el cielo, pintado en mi pecho, que quiebre a su latido
Oídos y desborde penas.
Si hablara de amor, no hablaría de corazones enamorados,
Sino de los corazones encallados en el abismo del fracaso,
Y la risa, con que hablan las almas, queriendo amor pero surcando soledades,
Abrigando destinos, esos de soñar hasta hartarse,
Y en su hartura, saciar de sus lágrimas, embelesos suaves y ternura.
Si hablara de amor desdeciría mis palabras, sudarían mis paladares, y mi lengua moriría,
Porque cuando hablo de amor termino en soledades,
Y lagrimas de amor puro y profundo, por eso no hablo amor como muchos lo hacen,
Sino que con desidia pienso labrar mis soledades,
Si porque yo no hablo de amor, con encantos superficiales,
O con ilusiones sin faz, sino que yo mismo descifro la escafandra para desnudar mi soledad.