Te seguiré soñando, aunque quiera despertar
Navegaré ciego, corriendo hacia el silencio
Como el alma solitaria, que no consigue naufragar
Aun cuando en susurros, se comunica en el lecho
Beso tus labios y sé que no estás
Viviendo en tu cuerpo, como en viejos tiempos
Por eso mi alma agonizante de pensar
Muere en ese beso, que acaricia recuerdos
Mitigo mi sed y es cada vez mayor
Al no encontrar en el recuerdo
Ni el frio, ni siquiera el calor
Sigo en tus ojos, mi dolor bebiendo
Mientras la vida soporta tus desprecios
E insistentemente en mis sueños te llama
Repitiendo lo mucho que te quiero
Y suplicando que no se extinga la flama
Estando en tus brazos, te siento vacía
Como si estuvieras, obligada a querer
No sé cuándo dejaste de ser Mía
Ni cuando tu alma se apoderó de mí ser
No sé si en tus labios existe el deseo
Insaciable de amor, que en los míos tienes
Quizás, te persiga un mórbido recuerdo
O es que la duda agobia tus simientes
Quisiera penetrar en tus sueños
Y descubrir del amor un pálido reflejo
Sin importarme si es propio o ajeno
Tan solo saber que late en tu seno.