Peregrina

ERRANTE

 

Mi mundo se llama Tierra,

donde haya yo nacido

vine al mundo sin talega.

 

Sólo necesito un nombre

que de otros me diferencia,

para transitar por la vida

dignamente y con prudencia.

 

Inventos son los del hombre

trazar lineas a la Tierra,

alzar muros, poner vallas

y marcarnos las fronteras.

 

Reparten lo que no es suyo

peleando siempre por lo ajeno,

cuando que ellos de paso están

también en este mundo.

 

De lo prestado mientras viven

Dios no ha dado potestad

de apropiarse, enseñorearse,

para luego llamar “mío”

a lo que de nadie es por igual.

 

Me detengo donde me agrada

y en todo soy servicial,

a cambio de algún desempeño

la paga devengada basta

para el alimento acercar.

 

No acepto firmar,

y qué me puede importar?

Mi palabra es la que vale

y no un garabato pintar.

 

De riquezas no me ocupo

pues éstas no me han de atar

y voy por la vida sin rumbo,

en paz y sin molestar.

 

Grandes distancias ando,

me muevo libre a cualquier lugar,

descubro a cada instante

la insania del ser humano

en ambición constante

por dominar y acumular.