Una historia que se repite, casi siempre después del funeral
la riqueza que deja el difunto alguien se las tiene que llevar
No sería esto tan triste si las reclamaciones las hicieran,
personas ajenas al que murió en el desván
son su propia estirpe que tienen cosas por reclamar
El llanto por el que muere, se entierra después del funeral,
el difunto pasa a ser otro hijo más que traga la madre naturaleza
Al parecer el panorama más optimista es que se sienten a conversar
pero, en general, eso dura muy poco porque todos quieren ganar
la ambición es más poderosa, me convenzo, que el amor fraternal
El diablo es más astuto que todo un grupo familiar
Se pelean y disputan las cosas que dejo el papa o la mama
Miro a esta familia y me pregunto ¿Son familia en realidad?
O ¿Son conocidos que compartieron mucho tiempo un mismo lugar?
Los abogados son necesarios ¿Para ver los derechos de cada cual?
en qué ley están esos derechos me pregunto sin dudar
Los ladrones se confunden, ya no saben a quién robar
pero están al acecho del que reclama más
reconocen al ambicioso de esta realidad
Esta disputa se acabaría si la familia fueran tres y nada mas
o el difunto fuera pobre y los hijos no tuvieran nada que desear
El padre que cambie esta realidad, se merece el cielo sin dudar.
El padre está llorando en lo alto y la lluvia son gotas de su faz
el amor que les enseñe, también muere después del funeral
Ahora comprendo que el dinero siempre divide siempre al final
¡Qué dichosos son los pobres ¡ ellos mueren y sus hijos no
conocen esta realidad.
solo queda el recuerdo de sus padres y eso no se lo pueden disputar,
cada uno lo tiene por igual
Nos parecemos a los buitres que reclaman su comida al final
y se llevan todo, todo lo que puedan llevar
El que menos reclama es desinteresado dirán, pero
no saben que es el más sabio al final
Menos mal que una cosa, siempre conserva el difunto,
el cajón no se lo pueden quitar.