Hoy saco de mi sistema el deseo de poseer a alguien, ya que si las amo no las ato a mi,
y si me amo, no me dejo atar.
De eso se trata el amor: de dejarlo Ser,
y no quererlo cambiar a nuestra conveniencia,
se trata de aceptarlo.
Si me aferro a algo o alguien -o al revés-,
me desato con amor, entendiendo que mi apego es falso,
es sólo un desatino que mi mente trae a mi eterno presente.
Hoy me desprendo de mis lazos de apego,
los libero con amor y me libero con amor,
el que reside en mi interior, el que me brinda mi corazón.
Dejo ir al pasado y a todos sus componentes,
porque soy consciente de mi presente,
del eterno aquí y ahora, ya que eso es lo que soy: un constante presente.
Lo que pasó, pasó...
Y hoy, dejo salir al apego, dejando que fluya con el viento,
ya que cumplió su propósito y yo ya aprendí la lección,
en su lugar dejo entrar a la energía y Amor de mi centro, mi Universo.