Hector Lopez

Luz de nueva luna

La estrella que entonce quisimos tocar

se desvanece con el paso del tiempo

y se convierte en brillante polvo,

que ciego vuela por el cielo.

Se apoya en mi temblorosa mano

que la sostiene entre lagrimas del desierto

 queriendolos minutos, las horas girar,

regresar a ese instante, el momento,

en el que te sostuve y te pude besar aunque

el polvo se perdió en la arena, es cierto.

 

Miro al horizonte, quieto, sin pestañear

y veo en la noche la luna que brilla,

la luz que yo todavía sostengo

se evapora y a su alrededor gira.

No me has olvidado, me dice,

mientras mi rostro sonriente iumina.

Siento que me elevo, la rodeo

me besa, me aparece una sonrisa.

De nuevo esto a tu lado.

Nnca dejé de estarlo, me explicas.