A la CRuz Roja española,
le tengo un grandísimo
cariño, pues me hizo un
gran favor hace como un
cuarto de siglo. Hacen una
gran labor en este país don-
de vivo. Supongo que en
otros pasará lo mismo. Tienen
muchos voluntarios, !quien pu-
diera hacer lo mismo!; siempre
que puedo aporto para los
necesitados lo que llamo mi gran
amor y cariño. Todos deberíamos
hacer lo mismo: aportar aunque
no sea más que un poquito, por
que muchos pocos son un mucho
sabeis que esto es cierto amigos
míos. Ayudan a mucha gente y
a veces pasamos de largo sin pen-
sar que en cualquier momento po-
demos necesitar la mano de esos
que siempre son nuestros amigos