Esta lloviendo sobre el pinar
Y una gota va mojando la hoja yerta,
Es otoño, un escarabajo se esconde
bajo la astilla que talara el hacha cruenta.
El sol...oculto, no se asoma a despedir el día.
Voy subiendo la pendiente, crujen mis pasos,
Pasos que han marcado la vereda de la muerte,
Donde un silencio envolvente empapa el alma.
Han callado los chiquillos, hoy son retraídos hombres,
Se ha marchitado la tarde, llueve y llueve,
Allá abajo, los tejados cual roja sábana relavada
Entinta mis pupilas…y una lágrima de sangre
Firma en el cartón de las edades la herencia dolorosa:
Un poema, una canción y un beso prisionero,
Con un amor que no sabe de lisonjas,
Iluminado por pasión de encendido pebetero
Que no apagan las gotas de un otoño
Que se vuelve amargado compañero.
Así se vuelve un domingo de octubre
Cuando tus ojos no veo y tu verbo escucho lejos.
D. R. Vozdetrueno