Envuelta en los lirios de mi piel
Confundida en las montañas de mis abrazos
Sumergida en los torbellinos de mis besos
He soñado ser dueño de sus cerezos…
Viajando por los confines de su universo
Bajo la lluvia tenue de su mirada
Fui conociendo el jardín de su encrucijada
Para pintarla con la piel descobijada…
Mientras el calor de su voz se apagaba en mi boca
los pétalos de sus rosas decían que estaba loca
Mas los gritos silenciosos de mi pasión
Retumbaban en su pecho como una canción…
Desde el subconsciente de mis enredaderas
Hoy paso a ser el dueño de sus caderas
Mientras dure la noche sin estrellas
Y se apague su voz y la luz de sus miradas bellas…
Freddy Vásquez