Mis ilusiones podrían parecer rebeldes y tercas, sin ninguna intención de retractarse o parecer nuevas.
Son como siempre lo han sido, como siempre lo serán, como siempre te han parecido.
Son injustas e indecisas y no me considero alma sucia o mal intencionada.
Solo son y siempre serán como ninguna otra, sinceras y precisas.
Ilusiones injustas.
Pero te garantizo que será la injusticia que te llenara el corazón de amor e injusta felicidad.