matteo

¡No canto más!

 

A ella, solo a ella elevo mi canto, canto al  amor,
a ese cuerpo hermoso, intrigante.

No era yo, escapé de mi mismo.

Hundido en el fango de la ciudad.

Huyendo de mí.

Mi astilla lastimera, también me dejó.

Mejor dicho, la dejé en el bar…

No la necesitaba. ¡No canto más!


por: matteo            24/1032013