Imaginando deseos de vida.
Ver niños de toda raza social,
jugando en los parques
y en las plazas.
Parejas de novios
tomados de sus manos,
sonrientes, felices.
Ancianos sentados en un banco de plaza,
leyendo un diario o una revista,
o quizás una vieja carta de amor...
Ver amigos platicando,
jugando al fútbol,
o a las cartas...
o tomando una gaseosa o una cerveza,
riéndose, y notando alegría en sus rostros.
Viendo niños bien vestidos,
sin ropas andrajosas,
sin pobreza en su aspecto.
Sin desnutrición...notando
una buena alimentación.
Todo es alegría, todo es paz.
Cada uno con lo suyo.
Nadie roba a nadie.
Las pertenencias de cada uno,
son exclusivamente de ellos,
sin que nadie intente robárselas.
No hay sangre en ningún ser que veo.
No están heridos, ni lastimados,
no han recibido ni un tiro,
ni un accidente, ni una puñalada
en su pecho o espalda.
Todo es paz.
Veo salir a gentes de la iglesia,
con sus rostros dulcificados
por haber estado en la casa de Dios.
Por haber escuchado las palabras
del Señor, que los ha transportado
al entendimiento, a la reflexión,
y han de tratar de imitar a Cristo.
No percibo enemigos, ni mala gente.
Todo es paz.
Delante de un negocio de venta de revistas,
desde una radio escucho
un hermoso concierto,
que satisface a mi espíritu,
y al de los demás.
Todo es alegría y paz.
Todo el mundo los percibo
con buena salud.
No veo gente decaída,
todo lo contrario,
veo gente totalmente animada,
y sobre todo, muy feliz.
Y siento en mi alma
una alegría tal...
que deseos tengo de correr
y gritar al mundo que somos felices,
todos, sin excepción.
Claro, aquí todo es paz.
No existe la maldad.
Todo es amistad, compañerismo,
amor, solidaridad,
retribución de buenos sentimientos
de un ser a todos los demás seres,
unificados por el amor y
sobre todo, la paz.
Esta paz que llega a mi alma,
porque veo que todos son felices,
y me transmiten su felicidad
a mi ser...
Todo es paz...
Todo es alegría...
¡Qué maravilloso es imaginar
que la vida es así!...
Derechos reservados del autor(Hugo Emilio Ocanto -26/10/2013)