La vida es hermosa cuando se sabe elegir con quien compartirla, aunque aveces es dificil saber decidir, porque los ojos engañan y el corazón se emociona sin conocer. Otras tantas veces damos mil vueltas sin saber si es lo ideal. Pero en las cosas de la vida hay que construir y no esperar que llegue lo ideal, porque a veces nunca llega. En algunas ocasiones es mejor buscar eso que tanto anhelamos, el amor, pero a veces buscamos donde no demos buscar. También, puede suceder que el amor lo tenemos enfrente solo que los ojos no lo saben reconocer, hasta que el corazón despierta. Solo es cuestión de reconocer en su mirar si hay ese no se que, que te hace efervescer de pies a cabeza, y si eso te hace sentir con solo mirar su alma, lo que sigue es vincular el alma. Aunque sea cuestión de reconocer al amor es mejor caminar lentamente para evitar un resbalón, eso digo porque las caidas duelen y si que duelen.