Anoche soñé con tu ombligo
A lo largo de toda la noche
A un cuarto de tus abismos
A tres cuartos de tus montes.
Mi boca andaba libando
Tu piel cuando hallé el salobre
Camino hacía tus espasmos
Condecorado de flores.
De pronto seguí mi rumbo
Bajando hacia tus ardores
Que bullían como murmullos
Anhelando ser horizontes.
Soñé soñé que me hartaba
Con el sabor de tus goznes
Que lentamente chirriaban
Haciendo eco en mi nombre.
Seguí soñando y te digo
Que terminé al galope
Cruzando tus campos de trigo
Y cosechando tus goces.