Un beso tuyo me provoca,
Desastres que mi alma goza:
Tus besos son esa tentación que expulsan de mí,
maremotos de pensamientos, inundaciones de sentimientos,
para que nuestros cuerpos a punta de besos formen el fenómeno del niño.
Tus besos me provocan huracanes por tocarte,
volcanes por desearte, tormentas por mojarte,
tus besos remojan las sequias de mis labios,
son ese verano de acaricias en que nos excitamos,
son el incendio de nuestros abrazos que nos funde a ambos,
son los tornados que nos entrelazan en la cama,
son aquel Tsunami que arrastra nuestras lenguas a mas y mas allá,
son el derrumbé de placeres con oleajes de deseos impredecibles,
que nos matan, que nos encantan, que acaben nuestras ganas.
Tus besos son un desastre en mí ser,
que sin prevenir o prever mis ansias están para el,
sean por las mañanas o en las tardes,
entre la noche o el amanecer,
me causan el mismo placer.
No seré yo el que hará prevención,
ni veré el estado del tiempo,
no me preocupara nada del universo,
solo espero el desastre de tus besos,
que soporta y goza mi cuerpo.
Dios me dio la vida,
Pero tus besos me la inspiran,
si hubiésemos sido Abrahán y Eva,
la manzana no hubiese sido el problema,
si no el desastre que tus besos me llenan.
Por favor bésame para avalancha con todo este poema...