Aquellos días que juntos los pasamos
Fueron días dorados que me hubiera gustado repetir
Pero el tiempo siguió corriendo sin poderse desistir
Y por eso nuestras vistas divergieron y dócilmente nos separamos.
En nuestro tiempo siempre como estrellas brillamos
Uno a lado del otro fue como se fue personificando
Los guiones de nuestras historias se fueron unificando
Creando dentro de uno y del otro felicidad con la que disfrutamos.
Sin embargo el hilo que nuestros corazones estaba uniendo
Lentamente como las arenas del tiempo se fue deshaciendo
Entre nosotros surgieron barreras diversas simultáneamente
Obstáculos que con frecuencia había pasado volvieron rápidamente.
El camino que transitábamos se hizo una pista de trampas
Te pusieron adelante de ellas para que yo pudiera a ti llegar
Quise pasar por encima con un gran salto usando todas las rampas
No obstante al pasar por ellas se hacían más imposibles de atravesar.
Al final nuestros guiones y caminos se apartaron
Cada uno llevaba a un posible mañana pero sin volvernos a mirar
Ya no puedo proseguir por ese camino que los destinos crearon
Por lo que te digo: “Perdón, pero esto ya no puede continuar”.
Espero que en algún mañana nuestros caminos se crucen otra vez
Aun cuando aquellos sentimientos como flores se marchitaron
Te mando los mejores deseos en tu nuevo viajar con nitidez
Sigue tu paraje sin olvidar aquellos bellos instantes que se incitaron.
Esta es mi manera en la yo me despido de ti
Incluso arrancando la esencia que dejaste en mi
Aunque no me llegues a escuchar será el secreto de mi antiguo amar
Diciendo solo esto: “Perdón pero aquí te tengo que dejar”