TU PRESENCIA SE DURMIO
EN LAS YEMAS DE MIS DEDOS,
Y EN MIS LABIOS COMO SOLES,
CADA UNO DE TUS BESOS.
EL ALIENTO DE TU VOZ,
FORMO RIOS DE PALABRAS,
Y EL AROMA DE TUS OJOS,
COMO CLAVELES DEL AIRE
QUE DEL CIELO SE COLGABAN.
CON ESTA SED DE AMARTE
COMO PODER OLVIDARTE.
SI EN EL LIBRO DE MI VIDA,
NO HAY FORMA DE PODER BORRARTE.