me gustaría escribir lo que siento
y que el papel cargara con ello,
dejar el torbellino sin sentido
de intentar sacar sonrisas donde no las hay,
pero no puede ser,
el papel no siente,
no puede cargar con los mios,
no puede abrazarme ni curarme,
y tras años de levantarme en la esperanza
el solo muestra la montaña rusa escrita...
esto no es poesía
solo un grito de soledad impaciente por volver
en el silencio de la esperanza,
un grito que se ve
y que mando desde una jaula invisible
construida por mi mismo...
nadie sale ni entra
soy inmobil en espacio y tiempo,
en el miedo de que todo se rompa,
pero sin tener nada...