La inspiración está en todas partes,
en los colores de un test de embarazo,
en un abrazo,
en los besos de los vasos de tubo
que no se vuelven a llenar.
Quizá también esté en el cielo,
en este suelo, pegajoso,
y es que son demasiado pocos
los que se ganaron mi confianza,
te lo puedo asegurar.
Y qué si estoy loco,
si el cuerdo no es capaz
de ver lo que pienso
ni pensar lo que veo,
y qué si soy feo
si estas letras enamoran
a la más guapa,
que te follen es la palabra,
si es que no sirves ni para hablar.
Los límites están por todas partes,
en el latex de los condones,
en los cordones de la muerte
que no deja a la vida ir más allá.
Está en el tiempo,
que no deja al abuelo ser joven.
Está en tu mente,
cuando dice que estorbo,
es obvio,
lo desconocido asusta,
el miedo es el límite más fuerte,
y los sentimientos nos vienen demasiado grandes.
Parecemos unas raza de máquinas
de las cuales muy pocas aspiraron a ser humanos,
pierdo la fe, cuando nos damos la mano,
y hay dos móviles, incluso tres,
en medio de nosotros.
Porque cuando se juntan las dos mitades,
el resto se convierte en \"otros\"
lo importante en \"nosotros\",
y eso asusta,
porque el tiempo es lo más valioso
y compartirlo con la persona equivocada,
sería como dejar que el azúcar del café
se quede en el fondo,
y no la llegemos a probar jamás.