Escucha atentamente lo que sucede a nuestro exterior y dime, ¿escuchas como las gotas golpean nuestras ventanas mientras nosotros sordos y mudos nos convertimos en uno solo en aquella habitación repleta de pasión y perfume de rosas?.
Escucha, acaso ¿no te das cuenta como nuestros cuerpos se mueven al compas de tal espectáculo como lo es la lluvia?, ¿acaso no notas que la pasión se enciende cada vez mas mientras el jardín es regado a la luz de la luna por el mismísimo y perfecto cielo?.
Dime, acaso ¿no sientes como mis labios se unen con los tuyos y como mis latidos aumentan para así demostrar este sentimiento tan difícil de describir?, dime amada mía, ¿acaso no sientes como bajo una oscuridad absoluta mis suspiros se introducen por tu oído y hacen un intento de salir por todo tu cuerpo, ocasionando así que este se erice de la manera mas sensual y perfecta?.
Escucha, cierra los ojos y percibe esos sonidos tan esplendorosos que tan solo una noche como esta nos puede proporcionar. Si oyes?...No, no te alarmes, pues estos ruidos no provienen de los truenos, son tan solo el sonido que mi corazón emite cada vez que estoy contigo, escúchalo y guárdalo en lo mas recóndito de tu ser, pues nunca alguien mas ha oído u oirá tal sinfonía, que solo un sentimiento verdadero puede ocasionar.