Tristeza que envenena,
trae a mi mente recuerdos infelices
que hacen a mi mente dudar
y a mi cuerpo temblar.
Tristeza que me da miedo
y hace que caiga en su juego.
Tristeza que hace que llore como un recién nacido
y lastime aún más mi corazón herido.
Tristeza que me mantiene en un mundo obscuro,
lleno de amarguras pero sobretodo inseguro.
Tristeza que me hace perder a seres queridos,
incluso el amor hacia mi mismo.
Tristeza que me hace pedir ayuda
y se ríe en mi cara haciéndome perder la cordura.
Tristeza que me abofetea y que me hace sentir perdido,
llamar a la muerte para dejar de existir en este mundo podrido.